Después de que se reportara una situación irregular en el Midtown Manhattan – específicamente en el área del Port Authority Bus Terminal – la policía de Nueva York aseguró que se trataba de una explosión en el metro de la ciudad, que ha paralizado la zona de las 42nd Street y 8th Avenue, durante la mañana de este lunes.

Según los voceros de las fuerzas policiales, la única persona herida sería un sospechoso que ha sido detenido y que posee heridas leves, y la situación ha sido catalogada de “muy fluida”, reduciendo la alarma de un posible atentado.

Los agentes han procedido a evacuar las líneas A, C y E del metro, y han creado un cordón de seguridad en la zonas aledañas, incluyendo Times Square, según reportó el Washington Post.

Según el reporte oficial de las autoridades, el individuo ha sido identificado como Akayed Ullah de 27 años, inmigrante de Bangladesh, quien habría ingresado a Estados Unidos en el 2011.

Ullah detonó una bomba rudimentaria atada a su cuerpo en una de las zonas más concurridas de Manhattan durante la mañana del pasado lunes, causando el pánico entre los transeúntes.

La detonación no causó mayores víctimas, tan sólo tres viajantes y el atacante sufrieron heridas leves.

Según reportó el Washington Post, la bomba diseñada por Ullah estaba adherida a su cuerpo con cintillos y velcro, y fue detonada alrededor de las 7:20 de la mañana, mientras atravesaba un pasaje del metro desde la estación hacia la 42nd Street y Eight Avenue.

Ullah habría confesado a los investigadores haberse inspirado en la propaganda del grupo terrorista ISIS, y que habría actuado por cuenta propia.

Por su parte, el presidente estadounidense Donald Trump utilizó el incidente para reafirmar sus posturas anti-inmigrantes, asegurando en una declaración que el ataque “demuestra la necesidad urgente de que el Congreso apruebe las reformas legislativas necesarias para proteger al pueblo estadounidense”.

Asimismo, el presidente aseguró que “Estados Unidos debe arreglar su débil sistema migratorio, que permite a muchas personas peligrosas e investigadas inadecuadamente, entrar a nuestro país.

Reforzando las palabras de Trump, el Fiscal General Jeff Sessions sentenció que “el hijo de 20 años de una hermana de un ciudadano estadounidense no debería tener prioridad de entrar a este país por encima de alguien preparado, educado, que ha aprendido inglés y que está dispuesto a adaptarse y a surgir aquí”.