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Esposa de Kobe Bryant habría maltratado a empleada peruana

Peruana empleada por Kobe Bryant reclama justicia, aunque perdona los abusos.

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La peruana María Jiménez, que fue
empleada de hogar de la estrella de la NBA Kobe Bryant.

 

La peruana María Jiménez, que fue
empleada de hogar de la megaestrella de la NBA Kobe Bryant, aseguró haber perdonado a la esposa del jugador por los abusos y
humillaciones que sufrió en la casa, aunque continuará con la
demanda presentada porque, según dijo, reclama justicia.

Jiménez, de 48 años, ciudadana estadounidense nacida en Perú,
trabajó como criada en la residencia del matrimonio en Newport
(California) desde septiembre de 2007 a marzo de 2008, momento en el
que se vio obligada a renunciar a su puesto por las "intolerables"
condiciones laborales.

"La señora estaba equivocada conmigo, pero yo la perdono porque
sé que hay un Dios en la tierra y ese Dios está haciendo justicia",
dijo Jiménez, quien presentó la demanda el pasado día 20
en la Corte Superior del condado Orange.

En el texto se especifica que Vanessa Bryant comenzó una serie de
ataques verbales sistemáticos hacia Jiménez, casada y madre de tres
hijos, a quien llamaba "jodida mentirosa", "tonta" y "vaga".

"Sufrí muchos maltratos", comentó Jiménez. "Tomé la decisión de
presentar la demanda porque no quiero que otras personas sufran
cuando están trabajando; tenía mucho estrés y dolor en mi corazón,
porque entregué lo mejor de mí para hacer el trabajo de la mejor
manera", agregó.

La demanda incluye a Kobe Bryant porque era "el empleador" de
Jiménez, según explicó a Efe su abogado, William Vogeler. "Mi
cliente trató de hablar con ellos sobre los problemas que tenía;
ahora ésta es la única manera de continuar el caso, yendo a Corte",
continuó.

Vanessa Bryant incluso dejó caer que sospechaba que había robado
ropa. "Pensaba que me la llevaba dentro de mi chaqueta, y en
realidad lo que llevaba sólo era mi blusa, porque me tenía que
cambiar para ponerme el uniforme", dijo la demandante.

"Conseguí mi trabajo por mis referencias; soy una persona honesta
y no me llevo las cosas de nadie, pero si pensó que lo había hecho,
¿por qué no llamó a la policía en ese momento? Yo no llevaba nada a
la casa, sólo mi "lunch" (comida), ¿en ese pedacito de bolsa iba a
sacar las cosas?, se preguntó Jiménez.

Las humillaciones llegaron hasta tal punto que Vanessa Bryant
ordenó a la peruana que metiera la mano en una bolsa con excrementos
de perro y retirase la etiqueta del precio de una blusa de Gucci que
previamente había puesto a lavar.

"Me obligó a hacerlo, fui humillada; lloré durante muchos días,
no sé qué había pasado, no lo entendía", manifestó Jiménez, que
también fue reprendida cuando una de las dos hijas del matrimonio,
estando enferma, acudió a ella en busca de cariño y la agarró de una
pierna.

Cuando Jiménez fue a devolverle el gesto de cariño, Vanessa
Bryant le gritó: "¿Tú quién eres? ¡Sólo eres una criada, no tienes
por qué agarrarla!", según relató la demandante. "Yo tengo respeto y
educación, no le dije nada y me fui llorando; lo hizo delante de
gente, es algo que me dolió en el alma", agregó.

En la demanda la peruana, que llegó a EEUU en 1985 y se ha
dedicado durante más de 20 años a trabajar como empleada de hogar,
exige una cantidad indeterminada por abusos emocionales, sueldos no
remunerados, invasión de la privacidad e incumplimiento de contrato,
ya que según sostiene Jiménez, los Bryant prometieron que le
proveerían un seguro médico.

No lo hicieron y ahora la peruana afronta una factura de más de
120.000 dólares de una operación a causa de unos tumores en la
matriz. "Me prometieron dar aseguranza y no cumplieron su palabra;
espero tener una respuesta pronto porque he de pagar ese dinero y
necesito otra operación de forma urgente", explicó Jiménez.

Los representantes de Bryant aún no han contestado a la demanda
porque "tienen un cliente muy rico y van a ser pagados sin resolver
el problema", en opinión de Vogeler. "Ojalá que Kobe vea que es más
barato resolver el caso antes de que sea muy costoso para todos",
apuntó.

Mark Campbell, abogado del matrimonio Bryant, hizo público un
comunicado en el que calificaba la demanda de "escandalosa". "Las
alegaciones son totalmente falsas e infundadas", indicó. "Los Bryant
confían en que se demostrará la naturaleza sin base de estas
alegaciones", concluyó.

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