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Jorge Ramos, presentador de la cadena de televisión estadounidense en español Univision, habla con los medios de comunicación, luego de que él y su equipo fueron liberados, en Caracas, Venezuela, el 25 de febrero de 2019. REUTERS/Carlos Garcia Rawlins
Jorge Ramos, presentador de la cadena de televisión estadounidense en español Univision, habla con los medios de comunicación, luego de que él y su equipo fueron liberados, en Caracas, Venezuela, el 25 de febrero de 2019. REUTERS/Carlos Garcia Rawlins

Jorge Ramos sobre Maduro: “No le gustaron las preguntas que le estábamos haciendo”

La detención del equipo de periodistas de Univisión en el Palacio de Miraflores por parte del régimen de Maduro pone en evidencia la naturaleza autoritaria y…

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“Si hacen esto con nosotros que somos periodistas extranjeros, imagínate lo que hacen aquí con los venezolanos”, dijo Jorge Ramos a Patricia Janiot en una llamada telefónica después de haber sido liberado de su detención arbitraria en el Palacio de Miraflores en Caracas el día lunes.

Después de haber obtenido el permiso para entrevistar al ex mandatario venezolano en el edificio presidencial, el reconocido periodista mexicano-estadounidense Jorge Ramos fue detenido junto a su equipo de Univisión durante dos horas en la noche del pasado lunes.

En una conversación que duró menos de 20 minutos, Ramos habría presuntamente mostrado a Maduro un vídeo en el que se observaba a venezolanos comiendo de un camión de basura en las inmediaciones de Miraflores, cuestionándole la realidad de la crisis humanitaria que vive el país.

“No le gustaron las cosas que le estábamos preguntando sobre la falta de democracia en Venezuela, sobre la tortura, los presos políticos, la crisis humanitaria que están viviendo”, dijo Ramos.

Maduro se levantó intempestivamente y canceló la entrevista.

“Inmediatamente después, uno de sus ministros, Jorge Rodríguez, vino a decirnos que la entrevista no estaba autorizada”, continuó el periodista.

Sus equipos fueron confiscados, y el equipo fue separado en cuartos de interrogación “con la luz apagada”, donde se les retiraron a la fuerza los teléfonos móviles.

“Se quedaron con nuestro trabajo. Se quedaron con la entrevista”, aseguró.

La situación fue comunicada por el presidente de Univisión, Daniel Coronell, a través de las redes, y fue seguida por declaraciones del Departamento de Estado de Estados Unidos y de gobiernos de la región, incluido el gobierno de López Obrador en México, uno de los pocos que se han abstenido en reconocer a Juan Guaidó como presidente encargado de Venezuela.

“Nuestro país hace un llamado al respeto de la libertad de expresión y refrenda su obligación en defensa de la seguridad de los ciudadanos mexicanos en el exterior”, escribió en Twitter la Secretaría de Relaciones Exteriores mexicana.

Aproximadamente una hora después, Univisión difundía una imagen de Ramos en su habitación de hotel y anunciaba que habían sido “puestos en libertad”.

Por su parte, el vocero de Maduro, Jorge Rodríguez, recurrió también a Twitter para criticar al equipo de Univisión y catalogarle de “show barato”.

Asimismo, Rodríguez culpó al Departamento de Estado de “inventar un nuevo falso positivo” para la “intervención militar en Venezuela”.

Rodríguez hacía eco de las palabras de Maduro en una entrevista con la cadena ABC que sí se llevó a cabo durante el día lunes, donde el ex mandatario venezolano decía a Tom Llamas que “el gobierno de Estados Unidos – que apoya al líder de la oposición Juan Guaidó – está ‘tratando de fabricar una crisis para justificar la escalada política y la intervención militar en Venezuela para traer la guerra a América del Sur’”, según reportó CNN.

Las declaraciones de Maduro coincidían con la reunión del vicepresidente estadounidense Mike Pence con el Grupo de Lima en Bogotá, donde se discutió una nueva estrategia diplomática internacional contra miembros del régimen chavista después de los sucesos violentos del fin de semana en las fronteras de Venezuela con Colombia y Brasil.