El encuentro anual de la Conferencia de Obispos Católicos en Baltimore, ha elegido a su primer Vice-Presidente Latino en sus 99 años de historia. El Arzobispo José H. Gómez de Los Ángeles, ha ganado con 133 votos.

Gómez, nacido en México, es un ciudadano naturalizado. En tres años ha logrado transformarse en el primer presidente hispano de la conferencia de Obispos.

Un par de días después de que Trump ganara las elecciones presidenciales y antes de su nombramiento, el Arzobispo Gómez y el Alcalde de Los Ángeles, Eric Garcetti, tuvieron un servicio de oración interreligioso en la Catedral Católica de Nuestra Señora de los Ángeles, en Los Ángeles.

La homilía fue muy sentida, y el Arzobispo prometió no abandonar ni a padres ni a niños que vivieran en miedo por las palabras de Trump sobre la deportación de millones de inmigrantes: “Este es el momento de construir la unidad y de sanar las comunidades, a través de nuestro amor a nuestro vecino y nuestra preocupación por aquellos que tengan necesidad”, dijo Gómez.

La decisión de Gómez como Vicepresidente, puede observarse como un signo de que los Obispos Católicos están preparándose para defender a los inmigrantes y refugiados contra las amenazas del Presidente recién electo, que han generado una reacción violenta contra los inmigrantes y las minorías.

Los obispos durante la conferencia, aprobaron una declaración dirigida a la nueva administración de Trump diciendo que “trabajaremos para provomer las políticas humanas que protegen al refugiado y al inmigrante, con la dignidad inherente, manteniendo las familias juntas y honrando y respetando las leyes de esta nación”.

Aunque los obispos extendieron sus congratulaciones a Trump, también le hicieron saber que la Iglesia Católica está comprometida con mantener las familias de los inmigrantes unidas.

Por otro lado, hubo algunas causas que pudieran estar de acuerdo con las del Presidente Electo como la eliminación o la limitación de los abortos, el cambio del mandato de la contracepción en el Acta de la Atención Asequible, y el asunto del matrimonio igualitario.

En Enero, las diócesis Católicas empezarán un plan de dos años para acercarse a los Católicos Latinos con la finalidad de participar más de la iglesia. El Papa Francisco apoya esta misión diciendo que podría causar un gran impacto en una “sociedad sujeta cambios sociales, culturales y espirituales desconcertantes, además de una polarización creciente”.

Más de un tercio de los Católicos Americanos son Latinos y provenientes de otros países. El sesenta por ciento de los Católicos en los Estados Unidos menores de 18 años son Latinos, y el noventa por ciento de ellos nació en los Estados Unidos.

“Los Obispos de los Estados Unidos reconocen la presencia de los Latinos en nuestra comunidad, en nuestro país y en nuestra iglesia” dijo Gómez, “Creo que nuestra misión es ayudar a las personas a mantenerse unidas en nuestro país, y a tener Fe”.