Hay equipos de futbol que tienen estrellas como Ronaldo, Messi y Neymar, que pueden llenar estadios cada semana y pueden ganar títulos importantes casi cada año. Por otro lado, hay equipos que se construyen desde cero, pieza por pieza, que sólo pueden soñar con llegar a una posición en las eliminatorias, pero seguirán luchando hasta el pitido final.

El  Chapecoense es ese tipo de equipo. Un equipo de muchos atletas jóvenes con talento, y con el mismo sueño - ganar un campeonato. En 1973, en la ciudad de Chapecó, ubicada en la zona occidental del estado de Santa Catarina, Brasil, dos equipos amateurs se fusionaron para convertirse en la Asociaciao Champecoense de Futebol y tuvieron mucho éxito en los primeros años.

El Chapecoense permaneció unos años en la liga regional, hasta que hace poco saltó de clasificación. Y así comenzó su historia de Cenicienta no sólo dentro de la liga, sino también con sus aficionados de vuelta en Brasil.

Desde 2008, el Chapecoense ha ido subiendo de Serie dentro de la liga nacional de Brasil. En la Serie D fueron terceros, en la Serie C el ranking más alto fue el tercero, segundos en la Serie B y recientemente, novenos en la Serie A.

El equipo ha sido comparado en varias ocasiones con el Leicester City, un equipo en la Champions Premier League, que a pesar de su baja clasificación, luchó a su manera por el título el año pasado. Caio Junior, entrenador del Chapecoense mencionó la comparación el pasado septiembre:

"Nuestro equipo realmente me recuerda al Leicester, un equipo de una ciudad poco conocida que fue capaz de ganar un título importante", continuó. "Quiero lograr una buena marca esta temporada con este club, este grupo de jugadores".

"Nuestro equipo realmente me recuerda al Leicester, un equipo de una ciudad poco conocida que fue capaz de ganar un título importante", Caio Junior, entrenador del Chapecoense

Esta fue la primera vez que el club alcanzó la final de una importante competición de club sudamericano. El camino no era fácil. El equipo tuvo que defenderse de los equipos argentinos de Independiente y San Lorenzo para llegar a la final. De penaltis en la ronda de 16 a marcar goles en la semifinal, el enfoque de los equipos y la ética de trabajo siempre llegaron a través del embrague.

No era de extrañar que el ambiente del equipo fuese muy optimista y positivo. El Chapecoense había luchado contra oponentes mucho más grandes y acababa de alcanzar su mayor y uno de sus últimos retos de la temporada - el Atlético Nacional de Colombia.

El vuelo charter 2933 despegó de un aeropuerto boliviano y estaba a 15.500 pies preparándose para aterrizar en Medellín, Colombia, cuando empezó a experimentar problemas eléctricos mientras sobrevolaba la región de Antioquia.

El piloto rodeó el área con el fin de quemar combustible y evitar una explosión mientras se preparaba para hacer un aterrizaje forzado, pero en un giro cruel del destino, el avión se estrelló contra una colina y se rompió en dos en una remota zona montañosa en los alrededores de Medellín a las 10 : 15pm de anoche.

El avión llevaba 81 pasajeros a bordo en el momento del accidente. Sólo tres jugadores y otros dos pasajeros sobrevivieron. Debido a las fuertes lluvias en la región montañosa, la misión de rescate tuvo que detenerse hasta el amanecer.

Diversos medios han informado de que el equipo tuvo que cambiar de avión y embarcarse en el aparato accidentado después de que las autoridades de aviación brasileñas les impidieran tomar el avión chárter.

La noticia del accidente ha devastado el mundo del fútbol. El Real Madrid y Barcelona guardaron minutos de silencio durante sus entrenamientos previos al "Clásico", el partido que enfrentará  a ambos rivales, el 3 de diciembre.

En un comunicado de la FIFA, el presidente Gianni Infantino comentó: "Este es un día muy triste para el futbol". Y continuó:  "Lamentamos mucho el accidente aéreo en Colombia, es una noticia impactante y trágica. La FIFA quiere extender sus más sinceras condolencias a los fans de Chapeconse, la comunidad de futbol y las organizaciones de medios interesadas en Brasil ".

"Este es un día muy triste para el futbol", Gianni Infantino, presidente de la FIFA

La CONMEBOL, en un comunicado oficial, ha anunciado la suspensión de todas sus actividades hasta nuevo aviso.

Inevitablemente, el accidente ha hecho recordar la catástrofe aérea de Múnich en 1958, que causó la muerte de 23 personas, entre ellas ocho jugadores del Manchester United, y varios periodistas y miembros del equipo técnico que les acompañaban en el viaje.

Dos presagios que destacan en esta tragedia: hace tres semanas, el mismo avión llevó al equipo argentino Futbol, incluyendo Lionel Messi y Angel Di Maria, a Belo Horizonte, Brasil, donde jugaron contra Brasil en un partido de clasificación para el Mundial.

El segundo fue un mensaje de Facebook que fue publicado cuando el equipo del Chapeconse se preparaba para abordar su vuelo: "Que Dios acompañe a nuestros atletas, técnicos, periodistas y otros huéspedes que viajan con nuestra delegación".

Un David que se enfrentaba a una liga de Goliaths. El balón de fútbol era su honda y cada tiro contaba en su camino hacia la victoria. Les robaron sus sueños de ganar un campeonato. Sin embargo, serán siempre los campeones a los ojos de sus aficionados de la ciudad de Chapeco, de todo Brasil, y del mundo entero, por haber demostrado que los sueños realmente se hacen realidad.