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Cientos de menores fueron abusados por sacerdotes de la Diócesis de Altoona-Johnstown

Cientos de menores fueron abusados por sacerdotes de la Diócesis de Altoona-Johnstown

Un jurado investigador estatal determinó que cientos de menores de edad fueron abusados sexualmente durante un período de al menos cuatro décadas por parte de…

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Un jurado investigador estatal determinó que cientos de menores de edad fueron abusados sexualmente por sacerdotes o líderes religiosos de la Diócesis Católica de Altoona-Johnstown, según anunció la Oficina de la Fiscal General de Pensilvania Kathleen G. Kane.

Según la investigación, el abuso generalizado se llevó a cabo durante un período de al menos cuatro décadas e involucró al menos a 50 sacerdotes o líderes religiosos.

Las pruebas y testimonios examinados por el jurado también revelaron evidencias inquietantes sobre los líderes de la diócesis, quienes tomaron medidas para ocultar el abuso infantil en un esfuerzo por proteger la imagen de la institución. El jurado publicó este martes un informe de 147 páginas que destaca detalles sobre estos abusos que pusieron en peligro a miles de niños y que permitió a depredadores identificados continuar abusando de víctimas adicionales.

"Los crímenes atroces que estos niños soportaron son absolutamente inconcebibles", dijo Kane, quien se dirigió a los medios de comunicación en el Centro de Convenciones del Condado de Blair. "Estos depredadores profanaron una confianza sagrada e hicieron presas a sus víctimas en los mismos sitios en los que las víctimas deberían haberse sentido más seguras".
El jurado analizó más de 200 pruebas y escuchó el testimonio de numerosos testigos, que a su vez se archivaron en miles de páginas de testimonios transcritos. Una cantidad sustancial de la evidencia física fue descubierta cuando los investigadores de la Oficina del Procurador General ejecutaron una orden de allanamiento en agosto pasado en una oficina de la Diócesis Católica de Altoona-Johnstown, descubriendo que mantenían materiales "archivo secreto".
"El encubrimiento perpetrado por los líderes del clero que permitieron que este abuso continuara durante décadas es sumamente preocupante. Fracasaron en una de las tareas más importantes de nuestra sociedad, que es proteger a nuestros hijos", agregó Kane.

La Oficina de Apoyo para Víctimas (OVA) (Office of the Victim Advocate) declaró en un comunicado que está repugnado y triste de saber de otro encubrimiento de violencia sexual que se extiende por décadas con cientos de víctimas.

"Aplaudimos a la Oficina del Procurador General por el buen trabajo de descubrir estos hechos dolorosos y terribles, en este caso, se remontan a la década de víctimas de los años cincuenta —que de otro modo no tendrían ningún camino legal a la justicia debido a la ley arbitraria y de limitaciones en el estado de Pensilvania.

OVA agregó que apoya firmemente la eliminación pura y simple de cualquier estatuto de limitaciones para casos de abuso sexual. "Las víctimas deben ser apoyadas y se les debe dar todos los recursos legales que los tribunales pueden ofrecer, para que puedan sanar y encontrar justicia contra los autores que los han perjudicado".