El gran debate de nuestro tiempo se centra en la alimentación. Cada día recibimos multitud de mensajes sobre los beneficios, perjuicios, propiedades y riesgos que tiene el ingerir ciertos alimentos.

Entre tanta información disponible resulta complicado discernir entre aquellos mensajes que son realmente útiles y a los que, por tanto, es importante prestar atención. Entre todos ellos destacan la reformulación de algunas afirmaciones relacionadas con los alimentos. Se trata de antiguos dichos y creencias que han sido desmontadas en los últimos años. La investigación en el estudio de los alimentos ha hecho que algunas famosas teorías se desmonten. Analizamos tres mitos sobre los alimentos.

Los diabéticos no deberían comer fruta

Durante años hemos escuchado decir que las personas con diabetes no deberían tomar fruta. La lógica aparente relaciona el azúcar que naturalmente contiene la fruta con la necesidad de reducir su consumo. Es cierto que la fruta contiene fructosa, sin embargo también cuentan con multitud de nutrientes necesarios para el organismo. Se trata por tanto de reducir su consumo y seleccionar aquellas con menos fructosa. En cualquier caso, la dieta de una persona diabética siempre debe ser supervisada por un especialista.

Los alimentos light son mejores que sus versiones normales

En general no. Es cierto que las versiones light contienen menos calorías que los productos a los que versionan. Sin embargo, es importante fijarse no solo en las calorías que estos contienen sino en los ingredientes de los productos. Además, se da la circunstancia de que los alimentos light sacian menos por lo que es muy probable que la persona que los toma se quede con hambre y al final del día acabe ingiriendo un extra de calorías innecesario.

Lo mejor son los zumos de fruta

No. Lo mejor es tomar fruta natural, sin haber sido procesada. Muchos zumos preparados contienen azúcar añadido y conservantes. Por otro lado, si el zumo se prepara en casa, será mejor que el que se vende en establecimientos pero nunca mejor que tomarse una pieza de fruta. Si tomamos la fruta preparada en forma de zumo, nuestro cuerpo no gastará energías en digerir este alimento y el azúcar que contiene pasará directamente a la sangre, provocando una subida del nivel de azúcar en sangre.

Resulta por tanto recomendable no solo revisar las etiquetas de todos los alimentos, light o no, que tomemos, sino también plantearse todos los mitos que alguna vez hemos escuchado sobre la nutrición.