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Si la persona se desorienta de forma habitual es necesario acudir a un médico. Foto: Johannes Plenio.
Si la persona se desorienta de forma habitual es necesario acudir a un médico. Foto: Johannes Plenio.

¿Es Alzhéimer?

Los primeros síntomas de la enfermedad a menudo son confundidos con simples olvidos.

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Según la BrightFocus Foundation, cada 66 segundos alguien en Estados Unidos desarrolla la enfermedad de Alzhéimer. Se trata de una enfermedad cada vez más presente en nuestra sociedad pero que sigue siendo una gran desconocida para los investigadores.

Los primeros síntomas visibles de esta dolencia llegan entre 15 y 20 años después de que la enfermedad se inicie. Es por ello que resulta de vital importancia saber reconocer sus primeros síntomas y acudir a un especialista cuanto antes. Entre estas primeras alertas del Alzhéimer se encuentran los olvidos. Y es que esta enfermedad genera una pérdida progresiva de la memoria, haciendo que la persona afectada comience por olvidar los datos más recientes, como qué ha comido ese día o sobre qué ha hablado hace tan solo unos minutos. Esta fase puede tener una duración de entre dos y cuatro años.

¿Cómo saber que se trata de Alzhéimer?

A la mayoría de los pacientes, les cuesta distinguir estos olvidos de los típicos despistes causados por la edad. Sin embargo, se trata de problemas diferentes. Los expertos señalan una serie de comportamientos relacionados con el avance del Alzhéimer;

La persona sigue descansando como habitualmente y no se encuentra sumido en una época de estrés. Sin embargo, los olvidos son cada vez más frecuentes y referidos a cosas que antes nunca olvidaba.

Los olvidos van acompañados de cambios en el carácter. Estos cambios pueden generar un buen humor inoportuno o enfados habituales. No hay una continuidad en el humor, sino que este cambia constantemente.

La persona afectada encuentra complicado organizar actividades que antes realizaba con facilidad. No entiende el coste económico de las cosas y le es complicado realizar acciones antes habituales como reservar en un restaurante.

Se observa una desorientación en la persona que a veces le impide reconocer dónde se encuentra. Comienza a llegar tarde a las citas y selecciona caminos más largos para llegar a su destino.

Los expertos recuerdan que cualquiera de estos comportamientos debe tratarse como una señal de la enfermedad. Ante un comportamiento de este tipo es importante aconsejar a la persona afectada que visite un médico cuando antes ya que es posible que él no sea consciente de la gravedad de la situación.