LIVE STREAMING
Seguir una dieta blanda no supone comer todos los días lo mismo. Foto: Foodie Factor
Seguir una dieta blanda no supone comer todos los días lo mismo. Foto: Foodie Factor

4 soluciones creativas para una dieta blanda

Los nutricionistas recuerdan que una dieta blanda no se compone solo de arroz blanco. Hay muchos otros alimentos que pueden ayudarte.  

MÁS EN ESTA SECCIÓN

50 años de defensa

Ayudando a las comunidades

Buscando hogares para todos

Reunión de líderes hispanos

L'ATTITUDE está en marcha

Líderes de la economía en EU

Elevando negocios diversos

Anuncio de la SBA

COMPARTA ESTE CONTENIDO:

Si tienes molestias en el estómago o acabas de pasar por una enfermedad, es posible que tu médico o tu propio estómago te estén recomendando seguir una dieta blanda. Cuando oímos “dieta blanda” lo primero que nos viene a la cabeza es que vamos a pasarnos varios días comiendo un aburrido arroz blanco. Sin embargo, los nutricionistas recuerdan que hay muchos otros alimentos que pueden ayudar a nuestro estómago a volver a la normalidad. Toma nota de estas cuatro soluciones y crea un menú diferente cada día.

 

Lácteos naturales

Es cierto que en caso de tener el estómago delicado, es importante evitar el consumo de leche. Sin embargo sí que es recomendable tomar lácteos en forma de yogur natural o quesos frescos. No solo tienen una textura agradable y son fáciles de digerir sino que te proporcionarán energía para ayudar a que tu cuerpo se recupere cuanto antes.

 

Verduras sí, pero en puré

Aprovecha estos días de frío para aliarte con cremas y purés de verdura. Tu estómago te lo agradecerá siempre que la comida no esté demasiado caliente. Las verduras son un alimento perfecto para un estómago delicado. Si no te gusta la textura del puré, puedes preparar una mezcla de verduras hervidas. Eso sí, olvídate de añadirle tomate a tus platos durante unos días. Es un alimento difícil de digerir y puede que tu estómago todavía no esté preparado para ello.  

 

Cereales

La recomendación de tomar cereales hay que tomarla con cuidado. No estamos hablando de los cereales azucarados que habitualmente tomas para desayunar, sino de cereales refinados. Búscalos en pastas enriquecidas, pan tostado o fresco, cucuús o avena. Olvídate por unos días de los cereales integrales. Tienen más fibra y pueden hacerte empeorar.

 

Pollo y pavo

Estar enfermos no supone que dejemos de comer. De hecho nuestro cuerpo necesita energía para recuperarse. En esos casos la ingesta de pollo y pavo puede ser beneficiosa.

Se trata de dos carnes blancas fáciles de digerir. Cocínalas a la plancha, al horno o hervido y procura no añadirles ningún tipo de grasa.

 

Estar enfermo no supone olvidarse de festividades como los días de navidad. Si te encuentras mal durante estos días, no olvides que tu cuerpo necesita energía para recuperarse. Idea un menú creativo combinando los alimentos de los que hemos hablado y recuerda no comer, ni beber, mucho. Estarás recuperado en unos días.

 
00:00 / 00:00
Ads destiny link