El dulce más codiciado de los últimos años podría tener ya heredero. Una vez pasados los días de gloria del cronut, ese donut hecho con masa de croissant que enloqueció a los habitantes de Nueva York que eran capaces de hacer colas desde las 5:00am y durante horas para tomar uno, son muchos los que pugnan por convertir al suyo en el pastelito de moda.

Una de las últimas propuestas fue presentada esta misma semana por el portal de innovación y tendencias Fast Company, aunque así a primera vista pareciese que no se trata de nada nuevo: un emparedado de helado. Sin embargo, lo interesante es comprobar que lo que hace de tapa del helado no es ninguna galleta sino un alimento que es muy conocido para muchos latinos: ¡un churro!

Así, Sylvia Yoo una pastelera pensó que el churro sería el complemento ideal para el boom del helado que vivía Los Angeles , la ciudad a la que se mudó tras estudiar en Nueva York. Después de probar barios churros, algunos con mucho sabor pero con una pésima textura, se quedó con los de Churros Calientes en LA y La Churrería en Nueva York. Desde entonces prepara pequeñas espirales planas que convierten a la masa del churro en la base perfecta para un helado. 

Esta deliciosa masita frita que se suele tomar mojada en chocolate fue traída desde Asia a Europa por los portugueses, y luego fue llevada hasta Latino América por los españoles convirtiéndose en un elemento frecuente en la cocina mexicana o cubana. Lo cierto es que la influencia churrera, sobre todo desde el país mexicano, ya había llegado yen la actualidad el concepto está ampliamente extendido en los Estados Unidos, especialmente en restaurantes mexicanos o que pretenden imitar la comida del país azteca. 

Por ahora para comerse uno de estos hay que viajar a Los Ángeles. Si consigue hacerse famoso, quizá el próximo food truck que encontremos en cualquiera ciudad de los Estados Unidos se parezca algo a esto...