"La ciudad de El Paso (Texas) está creciendo, tiene mucho movimiento y está muy bien, mientras que Ciudad Juárez está agonizando...muriéndose. Nosotros queremos investigar estos datos sobre el impacto que hay en nuestra ciudad con el éxodo juarense",  dijo la profesora de Periodismo en la Universidad de Texas en El Paso (UTEP), Ana Cárdenas, sobre el proyecto universitario 'Mexodus'.

Durante el semestre de primavera 2011, diez estudiantes de periodismo liderados por Cárdenas documentarán la reciente migración de más de 400.000 mexicanos que han huido de la violencia en Ciudad Juárez, en donde hasta ahora han muerto 8.500 personas.

Según la profesora, cada alumno escribirá dos historias que al final del semestre se traducirán al español.

Mexodus se enfocará, según explicó la profesora, en "el impacto de la inmigración en las áreas de educación (pública y privada), la salud, la cultura y los negocios. También en términos de estadísticas, por ejemplo cómo han aumentado la solicitudes de ciudadanía, de asilo, de visas de trabajo, etc."

Con respecto a la economía, la Cámara de Comercio Hispana de El Paso declaró que alrededor de 500 negocios se han establecido en la ciudad en los últimos meses.   

Para el comerciante Assurim Nicolás, propietario de una tienda de artículos de fiestas infantiles, la ola migratoria que ha llegado a El Paso ha sido muy beneficiosa.

"A mí me conviene no solo por las familias que se han mudado aquí sino por los paseños que ya no quieren ir a Juárez por la inseguridad. Prefieren pagar dos dólares más a lo que estaban acostumbrados a pagar con tal de no tener un rifle enseguida", dijo Nicolás, quien comenzó a notar el cambio a partir del 2008.

Cárdenas, quien antes de dar clases fungía como editora del diario AL DÍA de Dallas, dice que la transformación que vive El Paso es evidente en la vida diaria, pero que el reto de la investigación es tener números exactos del cambio.

"Este proyecto es muy interesante. Uno va al supermercado, escucha a personas hablar y te das cuenta que son de Ciudad Juárez. Vas a las escuelas y ves a un montón de niños juarenses. A mí me ha tocado escuchar conversaciones casuales en un bar o restaurante y es lo mismo", dijo la profesora, que cuenta con una larga trayectoria periodística tanto en México como en EE.UU.

Mexodus se logró gracias a un subsidio de $25.000 otorgado por la Fundación de Ética y Excelencia en Periodismo (Ethics and Excellence in Journalism Foundation), con el que se financiará un paquete de artículos de investigación acompañados de multimedia, que reportarán  los cambios y crecimientos causados por la inmigración.

Ciudad Juárez es conocida como la urbe más violenta de México e incluso considerada como una de las más violentas en el mundo. Del otro lado de la frontera, en cambio, El Paso es considerada la segunda más segura en Estados Unidos en el ránking de las urbes con más de 500.000 habitantes, de acuerdo con datos de la firma CQ express.   

Según la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) del estado de Chihuahua, se han detectado diez zonas en Ciudad Juárez en donde la "guerra" entre los carteles de la droga ha exterminado a unas 200 familias.

Se calcula que desde el 2009 la ciudad ha perdido unos 300 bares y 4.000 establecimientos de comida que se han visto obligados a cerrar por los ataques, secuestros y extorsiones del crimen organizado.

"La idea es enganchar a los estudiantes para hacer reportería de investigación donde tienen que hacer entrevistas de campo, buscar fuentes fidedignas y estadísticas en bases de datos. Esto complementado con multimedia a través de video, fotografía y sobretodo gráficos",  comentó la profesora.

El mayor reto de los estudiantes, según Cardenas, es llegar a números exactos en el aumento de la población que viene desde Juárez, ya que la dinámica de la frontera es muy cambiante y relativa.

"Una de las hipótesis que teníamos al comenzar el proyecto era que íbamos a poder documentar muy bien el cambio en los números de inscripción en las escuelas. Pero nos dimos cuenta que en el Distrito Escolar de El Paso el incremento de inscripciones entre el 2008, cuando comenzó la ola de violencia en Ciudad Juárez, y el 2010, fue solamente de 1000 niños", dijo Cárdenas.

La teoría de la profesora es que la mayoría de estos niños ya asistían a la escuela en El Paso pero vivían en Ciudad Juárez.

Para la periodista mexicana, este 'mexodus' es actualmente positivo para El Paso, porque significa mucho crecimiento y algo muy triste para Ciudad Juárez porque está perdiendo capital humano, inversión y estudiantes que tienen potencial.

"No puedes hablar de El Paso sin hablar de Juárez. Es una región muy integrada como una parte del cuerpo humano, si una parte falla, a la larga va a afectar a otra de alguna manera", dijo Cárdenas.