El mundo de la biónica parece haber dado el que sería su enésimo paso al frente en el campo de las prótesis médicas. Tras la creación de varios prototipos de piernas, manos, brazos e incluso exoesqueletos o trajes controlados con la mente del receptor; ahora ha llegado el turno de la óptica. El oculista canadiense Garth Webb, cansado tras años llevando gafas y lentes de contacto, acaba de revolucionar este sector con el anuncio de una inesperada creación: unas lentillas biónicas.

Lanzadas bajo el nombre de Ocumetic Bionic Lens, sus creadores prometen una agudeza visual tres veces superior a la considerada normal o estándar (20/20). ¨Si con dificultad puedes ver un reloj a una distancia de 10 pies, con Bionic Lens podrás verlo a 30¨, explica Webb.

Su secreto es una cámara, creada y patentada por el equipo, capaz de producir imágenes en tres dimensiones y en tiempo real. Tan solo es necesario implantar la lentilla al ojo con una operación de tan solo 8 minutos, un método similar al empleado para las cataratas.

El precio por desprenderse de las gafas y las lentillas para siempre se desconoce por el momento; aunque sí se ha hecho público el dinero y el tiempo invertido en su desarrollo, unos 3 millones de dólares y 8 años de investigación.

Pendientes aún de las pruebas clínicas tanto en animales como en humanos, sus creadores esperan que la comercialización de esta lentillas biónicas comience a producirse dentro de aproximadamente dos años, para 2017.